En ti que fuiste mi amor y mi querella
mi angustia, mi alegría,
la que con su aroma me impregnó la vida
dándome aromas para que sonriera
y yo dándole espinas para que sufriera.
En ti pienso hoy, sin ser olvido
a mi mente y corazón,
en ti pienso hoy como un suspiro,
como el ave que en un largo vuelo
hecho pedazos... nos dejó su nido.
mi angustia, mi alegría,
la que con su aroma me impregnó la vida
dándome aromas para que sonriera
y yo dándole espinas para que sufriera.
En ti pienso hoy, sin ser olvido
a mi mente y corazón,
en ti pienso hoy como un suspiro,
como el ave que en un largo vuelo
hecho pedazos... nos dejó su nido.
Te quiero madre y no te olvido.
Hola nerea, he visto que te has agregado a mi blog y me he dejado caer por el tuyo para dartela bienvenida al CSPeinadismo y esperar que te dejes caer de vez en cuando para poder saber de ti.
ResponderEliminarFelices Fiestas en todo caso.
Un saludazo.
¡¡¡Oh, que romantico y triste a la par que bonito!!
ResponderEliminar